Aprendí a no contemplar a la luna
Porque ya no entiendo a los astros
Y no sé contar la medida del infinito
A mi soledad, amiga impuesta,
La consiento si ella respeta tu recuerdo,
Refugio de tantos ratos en los que te siento
Que el que exista un tiempo y distancia,
Absolutos e inflexibles, entre tú y yo,
No quita que por ti, a veces, aún sonría
Porque ya no entiendo a los astros
Y no sé contar la medida del infinito
A mi soledad, amiga impuesta,
La consiento si ella respeta tu recuerdo,
Refugio de tantos ratos en los que te siento
Que el que exista un tiempo y distancia,
Absolutos e inflexibles, entre tú y yo,
No quita que por ti, a veces, aún sonría
No hay nada más maravilloso que sonreírle a un recuerdo... :)
ResponderEliminarvery nice blog ...wonderful..
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